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HORECA: El control de plagas en hosteleria, restauración y cafeterías.

El control de plagas en hostelería, restauración y cafeterías

HORECA: El control de plagas en hosteleria, restauración y cafeterías.

Metodología y mejores prácticas según la normativa vigente.

La salud según la Organización Mundial de la Salud.

La OMS define la salud como un estado de bienestar físico, mental y social y no sólo la ausencia de enfermedades. Así, la Sanidad Ambiental se ocupa de todos los elementos del entorno de nuestras vidas que puede afectar a la Salud. Entre estos elementos encontramos las plagas como un aspecto biológico que puede ocasionar molestias, transmisión de enfermedades y pérdidas económicas.

También el uso indiscriminado de productos químicos contra plagas puede ocasionar riesgos para la Salud y el Medio Ambiente.

Las plagas urbanas en ciudades y poblaciones

Las plagas urbanas son plagas asociadas a nuestro entorno cotidiano en ciudades y poblaciones y ha estado favorecida en las últimas décadas por la urbanización creciente, el cambio climático, el incremento de basuras, el comercio internacional y la globalización.

Como plagas asociadas a nuestra actividad, afectan directamente al hombre, ocasionando daños y molestias, deteriorando alimentos y nuestro propio hábitat. Así, pueden afectar a todo tipo de ámbitos en las ciudades, teniendo especial relevancia en los entornos domésticos de nuestro día a día y en las actividades relacionadas con alimentos como hoteles, restauración y comercios de alimentos.

Plagas como la cucaracha americana o la rata de alcantarilla, utilizan los residuos acumulados en las redes de saneamiento como nicho ecológico; el ratón doméstico aprovecha almacenes, empaquetados y despensas de alientos; la cucaracha alemana coloniza maquinaria y motores en bares y restaurantes.

Estrategias de vigilancia y control de plagas.

Las estrategias de vigilancia y control de plagas urbanas deben pasar imprescindiblemente por la realización de una diagnosis de situación y evaluación de niveles poblacionales presentes. De esta manera, según la actividad y uso de la instalación se deberán determinar las medidas preventivas aplicables y los niveles tolerables para posteriormente aplicar las medidas de control directo necesarias.

Partiendo de la base que en todos los ámbitos se deberían llevar a cabo programas de vigilancia y no esperar a la presencia evidente de la plaga, las medidas preventivas a realizar pasan por:

  • Medidas de hermeticidad: evitar holguras en ventanas, puertas o desagües, utilizar mosquiteras o rejillas, sellar juntas, etc.
  • Medidas de saneamiento o limpieza: mantener un correcto programa de limpieza
  • Medidas sobre hábitos y comportamientos: mantener el orden en el almacenado de alimentos, equipos y otros. Segregar residuos.

Los niveles de tolerancia sobre plagas vienen determinados por las características de la instalación y la actividad de la misma. Así, no será el mismo nivel tolerable de cucarachas el sótano de una comunidad de vecinos que la cocina de un restaurante.

Visitas periódicas de vigilancia

Para llevar a cabo esta estrategia se deben realizar visitas periódicas de vigilancia para evaluar periódicamente las medidas preventivas establecidas, así como evaluar el nivel poblacional mediante sistemas de monitorización (trampas y cebos). La frecuencia debe permitir la correcta vigilancia en cada situación, así es recomendable realizar visitas como mínimo trimestrales, (siendo éste un dato orientativo) pudiendo realizar una o dos visitas anuales en áreas domésticas o comunidades de vecinos, o visitas mensuales en hoteles o industrias alimentarias.

En las visitas de vigilancia programadas se evaluarán las medidas preventivas y los niveles plaga, así cuando los niveles tolerables se vean superados, se deberán tomar medidas correctoras o de control directo priorizando metodologías selectivas y las más respetuosas con la Salud y el Medio Ambiente.

Las medidas de control directo a priorizar serán siempre las físicas con trampas adhesivas o de captura, biológicas y en último término las químicas con el uso de biocidas autorizados para la plaga diana y el ámbito de actuación.

El programa, las visitas y las actuaciones deberán ser documentadas, emitiendo Certificados de Control de Plagas según la normativa vigente así como documentación anexa como el plano de ubicación de trampas o las acreditaciones de la empresa, operarios y productos.

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